El Encuentro Nacional de Participación Social en la Educación reunió a los actores más destacados e interesados en el fortalecimiento e impulso de la participación social, a continuación, se presentan algunas líneas conclusivas derivadas del mismo. Es una política segura y potente. Es una política lenta de construir. Demanda un trabajo constante, ya que su promoción requiere soportarse en habilidades sociales. Es el único camino para conformar la democracia. Su promoción desarrolla la corresponsabilidad. Está asociada a transparencia y rendición de cuentas, sobre todo con el manejo de la información. La participación debe permear todos los campos, temas y programas de la escuela. Un elemento que puede debilitar el trabajo con diversos sectores y actores de la participación social en la escuela, es el manejo del poder que representa uno de los ámbitos más difíciles de compartir, provoca desconexión entre los representantes y representados, tiende a buscar culpables en lugar de concentrarse en las soluciones y provoca falta de colaboración. La participación social no mejora por sí misma la calidad educativa, la impulsa y esto se logra a través de programas y acciones concretas. Sólo por participar no se logra mejorar, sino que deben existir objetivos claros y una forma planeada y sistemática de llevarlos a cabo, lo que genera una visión compartida de los actores. La participación es medio y fin, siempre y cuando los fines sean los objetivos, claramente planteados e impulsados colectivamente. La participación se logra con objetivos, con agenda, de lo contrario se corre el peligro deconvertir a la escuela en un espacio de activismo y no en un ámbito que persiga fines. El avance de la participación en la escuela se evidencia cuando ésta tiene capacidad de gestión y autonomía en tomar decisiones, en acordar, en rendir cuentas, en corresponsabilizarse.

Clasificación no especificada.

DVD, región no especificada.

Español.